Regresó el insomnio al caer el último
pétalo
Torrencial aguacero ensordeciendo mi
cielo
Cuento los segundos de cada trueno,
Y así se escribe el final de aquel
cuento.
Triste? Sí. Pero aun no estoy muerto
Se supone debería; me arrancaron la
vida!
Otra vez en el vivo porque no muero?
No. Entonces, que me mantiene con vida?
Me marcho, me exilio después del río
-ánimo, peregrino!- grita mi princesa
-vamos, ya suelta las cadenas!-
-hay dolor y muerte? Levanta al
guerrero!
-por eso cruce el río a matar el
rayito de luna-le digo
-entonces saca tu espada pero no
pierdas la cordura- me dice y rio
-solo eres un humano, no seas más
esclavo-se va como vino
-buenos días, ya despierto?- Desayuno
y pal Calvario.
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